El Holocausto o la Shoá fue uno de los episodios más traumático de la historia del siglo XX. No solo fueron asesinados millones de inocentes, sino que también se intentó matar la individualidad de cada persona. Aun así, muchos demostraron ser más fuertes que la deshumanización, que la desesperanza encontrando sentido a la vida en el sufrimiento. Viktor Frankl es quizá el más conocido de ellos.
Este neurólogo, psiquiatra y filósofo austriaco, sobrevivió desde 1942 hasta 1945 en varios campos de concentración nazis, incluidos Auschwitz y Dachau. A partir de esa experiencia, escribió El hombre en busca de sentido, considerada una de las obras capitales de la psicología. En este libro, Frankl describe cómo afecta la vida en un campo de concentración a la mente de un prisionero, y en este contexto reflexiona sobre el sentido de la vida y la libertad.
Este año recordamos el 25 aniversario de su fallecimiento, y al hilo de esta onomástica en Famiplay te presentamos 3 de las enseñanzas de Viktor Frankl sobre la vida.
1. Conócete y descubre el sentido de tu vida
Frankl creía que los filósofos de su tiempo -como Freud- habían interpretado al hombre “desde abajo”, atribuyendo una importancia desmesurada a lo instintivo, pero él miraba al ser humano "desde arriba". Desde el ideal, desde su capacidad de trascender, superarse y de construir un proyecto de vida. Por eso a la pregunta de ¿Qué es, en realidad, el hombre? Viktor respondía “es el ser que siempre decide lo que es. Es el ser que ha inventado las cámaras de gas, pero asimismo es el ser que ha entrado en ellas con paso firme musitando una oración”.
Para Frankl el sentido último de la vida era el amor. “La salvación del hombre está en el amor y a través del amor” escribe en El hombre en busca de sentido. “El amor ayuda a preservar la propia identidad individual en un entorno concebido para destruirla. Solo amando se puede conservar la libertad interior, la autoestima y la personalidad” concluye.
2. La vida tiene sentido en cualquier circunstancia
Frankl demostró que aún en las peores circunstancias imaginables merece la pena luchar por vivir, -y que de hecho- aquellos prisioneros del campo que no se rendían a la desesperación, o ayudaban a los demás a seguir adelante eran finalmente, quienes sobrevivían. En sus propias palabras “al hombre se le puede arrebatar todo, salvo una cosa: la última de las libertades humanas -la elección de la actitud personal ante un conjunto de circunstancias- para decidir su propio camino. Y es precisamente esta libertad interior la que nadie nos puede arrebatar, la que confiere a la existencia una intención y un sentido”.
Parte del secreto de esta actitud consiste también, en la aceptación de las circunstancias y el discernimiento de nuestra capacidad para intervenir en ellas. Como recoge Frankl en su libro “cuando la situación es buena disfrútala. Cuando la situación es mala, transformarla. Cuando la situación no puede ser transformada, transfórmate”.
3. Tus acciones diarias te llevan a ser la mejor versión de ti mismo
Las acciones diarias constituyen para Viktor Frankl la base de la construcción de los hábitos que forjan la personalidad. Es precisamente en estos ejercicios cotidianos de libertad donde sembramos lo que mañana cosecharemos.
Para Frankl, independientemente de las circunstancias y condicionantes siempre somos libres para decidir y responsables de esas decisiones, por ello solía decir que “el hombre es hijo de su pasado mas no su esclavo, y es padre de su porvenir”.
En Famiplay apostamos por un contenido de calidad, historias con valores que muestran que merece la pena vivir una vida con sentido. Para el tiempo de Viktor Frankl y sus circunstancias te recomendamos dos películas basadas en hechos reales: Dos coronas sobre la historia de San Maximilian Kolbe e Invencible basada en la vida de el polaco Zishe Breitbart.
